Es muy típico en la cocina que te pongas a preparar un plato y que cuando estas metida en faena te des cuenta que careces de algún ingrediente y no puedes ir a comprarlo, pero no te preocupes muchos de los productos tienen un sustituto fácil y a tu alcance, lo que pasa es que en ese momento puede que no caigas en ello. Esta entrada tiene la finalidad de echarte una mano en algunos de esos casos...
- Azúcar: El mejor sustituto es la miel. También se puede endulzar con nata azucarada.
- Chorizo para el puchero: Añade una cucharada rasa de pimentón dulce. No es lo mismo pero el sabor disimula su ausencia. En el caso de que sean lentejas puede sustituirse por morcilla.
- Huevos para rebozar: Leche con una pizca de colorante y otra de maicena para espesar.
- Fideos: Trocea un puñado de espaguetis o cambiarlo por arroz.
- Pan rallado: Coge una barra de pan dura y pásala por el rallador. También se pueden machacar unos colines. Algunos rebozados incluso las croquetas, quedan muy bien si se pasan primero por harina y después por huevo batido.
- Aceite limpio: Freír unas cuantas hojas de lechuga en el aceite sucio; veremos como queda limpio. se pude utilizar por lo menos una vez más. Este truco sin embargo solo vale para los aceites sucios, no para los quemados.